Café de tueste natural, torrefacto y mezcla: ¿en qué se diferencian?

26/05/2022

Como bien sabes, el café es uno de los productos más consumidos del mundo y son muchos los conceptos que giran entorno a este producto, entre ellos el tueste. ¿En qué consiste? ¿Qué diferencias hay entre los tres principales tipos de tueste? Te lo explicamos en el blog de Cafés Moreno.

¿Qué es el tueste del café y por qué es tan importante?

El tostado consiste en el calentamiento del grano de café verde, tras su extracción de la cereza y su secado. En este proceso, el grano verde pierde humedad, aumenta de volumen y cambia de color y de textura.

El café verde es la forma original de los granos antes de prepararse para poder hacer la infusión. Es el café “crudo”, recolectado, extraído de su cáscara y secado. Tiene una textura suave y fresca y poco o ningún aroma, por eso, en el momento que se tuesta, la aportación de calor al grano verde provoca reacciones de pirólisis que transforma el aspecto del grano y provoca la formación de sustancias responsables de los aromas y sabores del café.

El café tostado es oscuro, duro y crujiente, desprende aromas complejos y puede ser más o menos brillante porque se han extraído sus aceites. Dependiendo del tipo de tueste, se conseguirán resultados distintos en los granos, que darán al café unas características concretas.

Tipos de tueste

Podemos distinguir principalmente entre tres tipos de tueste que se diferencian por el color y dependen del tiempo y la temperatura del tostado.

  • Tueste ligero, claro o canela: los granos tienen un color muy claro y poco brillo porque apenas han liberado aceite. De aroma frutal y algo herbáceo, los naturales propios de la planta. Se percibe mayor acidez y es un café con más cafeína.
  • Tueste medio: el café ya tiene notas más amargas y una tonalidad de marrón más oscuro. Se intensifican los aromas gracias a la caramelización de los azúcares, destacando notas que se asocian más al cacao y al caramelo.
  • Tueste oscuro: los granos se ven claramente más tostados, casi llegando a ser negros en el caso del tueste muy oscuro. Se desprenden muchos aceites y ganan más cuerpo. Es un café con poca cafeína, menos aroma y acidez, pero con sabor pronunciado y “fuerte”, con notas ahumadas y especiadas.

¿Y el café torrefacto?

Seguro que en muchas ocasiones has encontrado café torrefacto al ir a comprar. Es importante destacar que cuando hablamos de café de especialidad, solo podemos usar el tueste natural. Pero existen algunos cafés con tueste torrefacto que consiste en añadir azúcar al grano para que se caramelice. El resultado es un café más oscuro, más amargo, pero con muchos más matices ya que el azúcar los protege durante el tueste (si hablamos del buen café).

Parece que los orígenes de esta práctica están en la inexistencia de los métodos de envasados desarrollados en la época. El café tendía a volverse rancio con la humedad en las bolsas. La idea era proteger el grano de café con azúcar para poder mantener las propiedades durante un periodo más largo, ya que la capa de azúcar que se formaba por encima del grano lo alejaba del oxígeno.

Esta técnica llegó a España de la mano del empresario José-Gómez Tejedor en 1901. El grano que llegaba en esa época era escaso y de baja calidad, por eso se optaba por mezclarlo con azúcar para tener un café medianamente digerible.

Entonces, ¿café natural, torrefacto o mezcla?

Durante el proceso de tueste se llevan a cabo diferentes procesos que transforman por completo el grano y desarrollan su aspecto, color, sabor, textura y aroma. Por eso, saber distinguir entre tueste natural, torrefacto o mezcla es clave para saber qué estamos consumiendo.

  • Tueste natural: se obtiene a partir de los granos crudos, es decir, del café verde. Los granos se someten a un proceso térmico de tostado a alta temperatura, pero por un corto periodo de tiempo y no se añade azúcar ni otros elementos. Conseguimos un café más puro, intenso y con mayores matices. En Cafés Moreno te recomendamos que optes siempre por granos de tueste natural 100% arábica.
  • Tueste torrefacto: es un café de baja calidad cuyo tueste se obtiene mezclando un 85% de granos verdes con un 15% de azúcar aproximadamente. El resultado es un café muy oscuro, con sabor intenso y amargo.
  • Café de mezcla: es el resultado de combinar una parte de café torrefacto y otra parte de natural en proporciones y porcentajes variables. Te recomendamos que leas en la etiqueta cuánta proporción tiene de cada, ya que no es lo mismo un 50/50 por ciento o un 80/20 por ciento.

Como ves, es muy importante saber qué es lo que estamos consumiendo. Escoge siempre cafés de tueste natural, ya sea molido o en grano, ya que solo así apreciarás los verdaderos matices de un buen café.

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